Estamos en 2016 y, como sabemos desde 2011, no seremos Capital Cultural de Europa. La verdad es que, nos guste o no, aunque nosotros tengamos mucha más historia y mucho más arte (del pasado) que San Sebastián, la ciudad vasca nos gana por goleada en actividad cultural presente, en actividad económica y en nivel de vida.
Pero es que no quiero ni pensar lo que sería una Córdoba Capital Cultural con el actual equipo de gobierno en el Ayuntamiento, caracterizado por el sectarismo, la tricefalia y la gilipollez institucionalizada. Basta ver a las tristes figuras de la alcaldesa, (Isabel Ambrosio), del primer teniente de alcalde (David Luque), del que se cree alcalde pero sólo tiene 4 concejales (Pedro García), del que es realmente alcalde porque tiene de rodillas a PSOE e IU (el de Ganemos, no sé cómo se llama ni me importa)... sin olvidar al Alcalde con mayúscula (sólo por el apellido), un analfabeto que ha metamorfoseado su condición de lacayo de Castillejo en la de okupa de la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía por obra y desgracia de la ajada Rosa Aguilar,
No quiero ni pensar, digo, en las actividades culturales que esos personajes meterían en un programa que tendría como espectadores a ciudadanos de toda Europa, ni en la sarta de mentiras que derramarían sobre nuestra historia pasada.
Así, mejor que no tengamos la Capitalidad Cultural. Nos hemos ahorrado ser la vergüenza y el hazmerreír de Europa.
(3 de enero de 2016)
(3 de enero de 2016)
No hay comentarios:
Publicar un comentario